Siempre que paso por su casa,
al pie de su ventana,
me pongo yo a chiflar.
oigo a su mami que le dice,
llegó el del chiflidito,
que lata nos dará,
Hija ese no te conviene,
nada más te entretiene,
nomás sabe chiflar.
Hija sà sales a la puerta,
la dejas bien abierta,
no se vaya a mandar.
Sales nomás un momentito.
sà te pide un besito,
lo pones a chiflar.
Cuando su mamá se descuida,
nos vamos calle arriba,
no dejo de chiflar.
Cuando en obscuro rinconcito,
los dos ya muy solitos,
la empiezo yo a besar.
Oigo a su mami que le grita,
¡Ya métete lupita!
ya no lo oigo chiflar.
Ella se mete apresurada,
y yo de retirada,
pués vuelvo yo a chiflar.
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