En una casita chiquita y muy blanca
camino del puerto de Santa Maria
habita una vieja muy buena y muy santa
muy buena y muy santa
que es la madre mía.
Y maldigo hasta
la hora
en que yo la abandone
a pesar de sus consejos
no la supe comprender.
Ella me lleva en el alma
y tu en la imaginación
tu me miras con los ojos
ella con el corazón.
Lo tuyo es capricho
pura vanidad
lo de ella es cariño
cariño verdad.
De quien fue la culpa
no quiero saberlo
no se si fue tuya
o fue de la suerte.
O fue culpa mía
por no comprenderte
en vez de olvidarte
penaba por verte.
Anda y vete de mi vera
si te quieres comparar
con aquella vieja santa
que esta ciega de llorar.
Ella me lleva en el alma
y tu en la imaginación
tu me miras con los ojos
ella con el corazón.
Lo tuyo es capricho
pura vanidad
lo de ella es cariño
cariño verdad
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