Donde brilla el tibio sol
con un nuevo fulgor
dorando las arenas
Donde el aire es limpio aún
bajo la suave luz
de las estrellas
Donde el fuego se hace amor
el rÃo es hablador
y el minte selva
Hoy encontré un lugar
para los dos en esta nueva tierra.
América, América
todo un inmenso jardÃn
esto es América.
Cuando Dios hizo el edén
pensó en América.
Cada nuevo atardecer
el cielo empieza arder
y escucho el viento
que me trae con su canción
una queja de amor
como un lamento
El perfume de una flor
el ritmo de un tambor
en las praderas
danzas de guerra y paz
de un pueblo que aún
no ha roto sus cadenas
América, América
todo un inmenso jardÃn
esto es América.
Cuando Dios hizo el edén
pensó en América.
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